Thursday, January 24, 2008

Señor champagne

se me viene a la cabeza ahora mismo una cancioncita publicitaria de las de la TV que decía en Argentina "Señor champagne, monitor ... señor champagne monitor ..."

Esta mañana me regalaron un bolígrafo. Buena señal para que escriba, siga escribiendo. A veces no se puede detener la corriente de lo que llevamos dentro; debe ser así como no poder detener a la sangre que corre por nuestras propias venas.

Y una botella de champagne. Enooooorme.

Motivos? Un regalo de Navidad atrasado, de un proveedor.
Costumbres de cada Navidad.

Llegó tarde. El regalo. Pero un regalo no deja de ser un "presente". Y el presente es cada día. Sea Navidad, Pascuas, el día de tu cumpleaños o un día "normal", un día cualquiera. En definitiva, el día a día, en el que la sangre sigue corriendo por las venas.


También me regalaron una vela hoy, unas cuantas... dibujadas. Por ¿casualidad?

Dicho sea de paso, no se por qué pero hace tiempo que he vuelto a encender velas. Una gorda entre amarillita y naranjita, en el salón. Un ratito cada noche, hasta que me voy a dormir. Y cuando lo hago la apago y le susurro ... "buenas noches".

Al champagne algún día lo descorcharé. Y probablemente no recuerde que hoy le he dedicado unas letras...
Entra a la colección de alcohol que me han regalado estas Navidades, que se suma a la que arrastro desde la colección del año pasado ... Uno más, pero un poco más especial, más gordo, más grandote. Con más contenido, como para celebrar algo ... ¿gordo?

Buenas tardes, señor champagne.
Buenas tardes, señor lector. Y Feliz Navidad y día de hoy, normal...