Friday, May 19, 2006

Casualidades o mimetismo tal vez?

Empezaré diciendo que me llevo bien con mi directora. De verdad, de la buena.

Pero … ciertos parecidos me preocupan. Algunos más que otros.

Ya no sólo tenemos el mismo traje gris, y negro de la misma casa de ropa. Y a veces la mala suerte de las casualidades de coincidir en llevarlo puesto el mismo día, para la misma reunión juntas.
(Y no, no vestimos en Armani ... porque las dos trabajamos en la misma empresa pública, vio?)

Ni tampoco me preocupa que a veces coincidimos con los 7 u 11 cm de tacones de zapatos color marrón, de la misma casa de ropa. Para qué mentir?

No me inquieta que a las 2 nos guste colgarnos los móviles del cuello con las cintitas que se venden para eso. O llevar el mismo reloj de malla de goma Viceroy y también en gris.

O escribir mucho en las agendas. Y anotarlo todo. O enviar emails recordatorios.

También tenemos las mismas camisetitas de tirantes, de colores variopintos. Una vez más, de la misma casa de ropa.
Y también el mismo estilo de usarlas como “underwear”, debajo de los trajes.


También tenemos ropa diferente, claro está.
Y a ella le gustan las mechas rubias y el cabello corto. Y yo soy morena - a mucha honra - y de pelo largo y lacio.
Y nos graduamos de carreras universitarias diferentes. Aunque complementarias para trabajar en equipo.

Y gracias a Dios, y a las circunstancias, las dos tenemos mucho sentido del humor.
(Y a veces, también mucha mala uva. Lo se ...)

Para solucionar algunas de estas coincidencias he decidido traer un traje, de los que no repetimos, y guardarlo para ocasiones especiales – o mejor dicho, repeticiones los días de reuniones conjuntas – para evitar las bromitas de mal gusto “ 2 x 1”.

Hasta ahí, todo bien

Pero ayer anunció que estaba embarazada.
Y espera para el mismo mes que yo, esperé a mi hija.
Aún no sabemos el sexo.

Pero … también se quedó embarazada a la misma edad que yo. Y tendrá al BB a la misma edad que yo (porque también le toca cumpleaños en medio).

Menos mal que nos llevamos bien.
Eso facilita las cosas. Mucho, la verdad.

De momento no sabe que me gusta conducir.
Procuraré que no se me note demasiado…

Autocontrol

Ayer tuve que frenar mis instintos.
Fue sencillo. Contrario a lo que alguna vez pensé.

No puedo echarle la culpa al famoso slogan de “Te gusta conducir”. ¡Ya me gustaría a mí! Pero teniendo – o no – años de terapia encima, más vale pasados los 30 asumir ciertas cosas.

Entre las tantas funciones que tenemos los que trabajamos en los Servicios Generales del Hospital, tenemos la de movernos los coches personales cuando, por ejemplo, tapamos el vado permanente de nuestra querida Lavandería y Central de Esterilización.
Vale decir, todos los días.

(Capítulo aparte será hablar del próximo estacionamiento subterráneo que algún día tendremos, la guardería que incorporaremos y dicho sea de paso, la ampliación que se nos viene encima del Hospital.
Aunque no se para qué porque no sabemos – o no queremos saber mejor dicho para no perder las esperanzas – si los nuevos espacios comunes van a solucionar los problemas actuales, o ser insuficientes para los problemas futuros. Porque vamos, que si ampliamos seremos más. Y más usuarios, más empleados, y ese “más” también trae aparejados más coches, más “peleas” por meter la trompa de tu coche personal antes del que viene detrás, o al lado tuyo).

A veces uno de mis colaboradores mueve mi coche, a veces yo el suyo.
Y alguna que otra vez, ¿cómo no? También nos toca mover el de nuestra directora.
Hasta ahí, todo bien.

Excepto cuando el coche de ella tiene algún inconveniente y entonces trae el pedazo de BMW gris plata deportivo de su pareja.

Y entonces …. ¿a ver quién lo mueve? ... sin irse en él y no volver nunca más. No se trata simplemente de volver al vado a por tu propio coche, sino a trabajar, o mejor dicho a devolvérselo a ella para que el coche pueda volver a su dueño.

Ayer me tocó a mí.
El objetivo era solamente moverlo de sitio, aunque … ¿para qué nos vamos a engañar? Di una vuelta larga larga laaaaarga por todo el recinto del Hospital ; - ) Total, como nunca hay sitio.


Que si me gusta conducir? Siiiiiií!
Por qué? Pasa algo?

Monday, May 15, 2006

Todos los derechos reservados

Por supuesto para la RAE,
que dice que ...

ganancial.
1. adj. Perteneciente o relativo a la ganancia.
2. adj. Propio de la ganancia.
3. m. pl. bienes gananciales.

V.
sociedad de gananciales



bienes gananciales.
1. m. pl. Der. Los que, por oposición a los privativos, obtienen o adquieren los cónyuges durante la sociedad de gananciales y que son considerados por la ley patrimonio común de ambos, por lo que son susceptibles de división en el momento de liquidarse aquella.


y para la empleada de esa entidad bancaria que dice que me casé para eso.
Para endeudar a mi marido.

Si al menos fuera optimista la piba, y trabajara en la otra vereda - en vez del sector bancario - bien podría decir que me casé para enriquecerlo.


Ni lo uno ni lo otro ...


Y hablando de bodas, hace años que no pisaba una.
Este año, de momento, se que caerán 4.
O acaso ... me falta más info de algún otro interesado en pasar por el altar? Andrés seguro que no ... bien lo dice en sus canciones.