Friday, February 09, 2007

Recortes de palabras ...

Vale la pena citar algunos retazos de su cotidianeidad.
Máxime si va a ser una especie de ... ¿maestro?. Tal vez.


"Es posible, en un poema o en un cuento, escribir sobre cosas y objetos comunes y corrientes usando un lenguaje común y corriente pero preciso, e impartirles a esas cosas -una silla, una cortina, un tenedor, una piedra, un arete de mujer- un poder inmenso, incluso perturbador".

"Tú no eres tus personajes, pero tus personajes sí son tú".

"Todo es importante en un relato, cada palabra, cada signo de puntuación. Creo mucho en la economía dentro de la ficción. Algunas de mis historias como "Vecinos" fueron tres veces más largas en sus primeros borradores. Me gusta realmente el proceso de reescribir".
Raymond Carver

Responsable

En un mundo donde a casi todos nos reparten, nómina de por medio, funciones y responsabilidades ... y hasta nos ponen objetivos ... no está nada mal ser responsable de una frase como ésta.

- "¿Y? ¿Conseguiste lo que querías en esta vida?
- Lo conseguí.
- ¿Y qué querías?
- Considerarme amado, sentirme amado en la tierra".
Raymond Carver

No se si acaso él desempeñaba su trabajo, o mejor dicho su oficio cotidiano de escribir "ad honorem". Como todos, supongo, en sus inicios.
Lo mío, de momento, es puro placer.
Mientras sigas estando ahí, yo tendré cosas que plasmar acá. Y te seguiré diciendo. "Gracias, lector".

Va a ser que Carver nos hablaba de la cotidianeidad.
Me alegro de haberme topado con él. Por ahora no he entrado en su "Catedral" aunque me han augurado que se tratará de un paseo que vale la pena. Veremos ...

Luz verde

Llevo casi un año esperando que "ese" semáforo, el primero que paso cada mañana de camino al trabajo aún cerca de casa, esté en "verde".
Es algo sencillo. Una de tres posibilidades entre las que nos da el arcoiris: amarillo, rojo o ... la que nunca veo.

No se si acaso puede significar que busco otra cosa en mi vida, al pretender que ese semáforo me de vía libre. Algo como una dosis de verde esperanza, de esos ojos verdes casi aceituna que tiene mi vieja ...
No puedo precisarlo, pero sí resumirlo: Lo único que quiero es ver ese semáforo en verde. Uno de estos días, un día de éstos.

Y va a ser que lo mío es la "cotidianeidad".
El profe del taller nos dijo que teníamos que pensar sobre qué temas queríamos trabajar. Cuáles son nuestros temas.

A ver quién me regala Carver, y sino me tendré que comprar algo de él yo misma.
Parece que este escritor nos habla de la cotidianeidad, de lo que te puede pasar a vos, a mí.

En tu vida, hay muchos semáforos en verde? ¡Qué envidia! Pero por favor no me digas que el de la cuesta del Limonar, ése, justo ése, vos lo llevás en verde todos los días...

Wednesday, February 07, 2007

Sencillez

Me parece de una sencillez aplastante.

Ha aparecido esta mañana, sin que lo buscara, en la pantalla de mi ordenador.

"Si quieres algo, sal a buscarlo y punto".

Digamos que es la forma de anunciarse de una nueva peli. "En busca de la felicidad".

Pero si decimos la verdad, en realidad, debe ser otra cosa.
O la abreviatura para muchas cosas ...
Yo lo dejo caer; que cada cual saque sus propias conjeturas ...

Tuesday, February 06, 2007

Selecciones (aunque no las del Reader´s Digest) ...

La piba se apuntó en un taller de escritura. Hace unos meses ya ... y sus mejores y peores críticos han resultado ser sus compañeros de letras, quienes dicen que ... estos son los mejores "trabajitos" de la semana que la piba ha hecho. O sea, "ANyRV".

La verdad es confesable. Estos trabajitos los ha hecho "bien", según dicen, porque se puso las pilas.
Los demás trabajitos, o no los ha hecho o los ha hecho de prisa y corriendo casi de pie en la barra del Café Central, a la vuelta del curso. Y dicho sea de paso, llegando de media 12 minutos tarde cada sábado.

No me arriesgo a decir que "No volverá a repetirse". Para no fallarme... digo ; - )


FIN DE LA PARTIDA (Clase de La sencillez)

Sin neones ni marquesinas desde la terraza un cartel se asoma y sentencia: “Se vende”.
Sin necesidad de pronunciarse, otras dos palabras resumen una difícil pero implacable decisión: Se acabó.

Mil razones personalizadas: las de él, las de ella. Enfrentadas unas, compartidas otras.
Un común acuerdo deja en manos de una inmobiliaria ese inmueble lleno de objetos. Y aquella terraza, plagada de recuerdos.

Se vende la casa. El juego acabó.
Nadie tenía en la manga el as del amor.Sobre la mesa una partida inconclusa deja ver las cartas que ningún jugador mostró: Par de corazones.
Par de corazones rotos.


Clase de las cartas (integrando los 5 sentidos ya que la piba faltó y debía los deberes)

Carta 1:


Toronto, 29 de diciembre de 2006

Querida hermana del alma

Es casi medianoche del último viernes del año. Último fin de semana de un año más que todos estamos ya a punto de despedir. Tú, yo, los lejanos amigos, los cercanos vecinos.
Nuestros hermanos.
Tus hijos. Mis hijos.

Como se suele decir, los tuyos y los míos. Y también los nuestros. Cada cual en sus coordenadas, intentando buscar su propio lugar en el mundo. Ley de vida, que le dicen.

No se por qué extraña razón, en estos últimos días todos nos encontramos vulnerables y ante la imperiosa necesidad de hacer balance del año que se escurre entre los dedos.

Intuyo que en tu vida, como en la mía, habrá habido sin duda momentos “más” y momentos “menos”.

Habrás tenido instantes, supongo, para desenfundar el polvo del mejor objetivo de tus viejas lentes fotográficas intentando capturarlos para siempre. Momentos grandiosos para usar frases de cuento del estilo de “qué ojos más grandes tienes” ... y procurar no sólo verlos, sino hasta poder recordarlos mejor.

Caperucita roja, te acuerdas, Sofía? Tu cuento favorito...
Si cierro los ojos inevitablemente te recuerdo pidiéndome que te lo contara una y otra vez. Una y otra vez.
No te cansabas de oírlo. Ni yo de repetirlo.

Se adueñan de mí otros recuerdos... Tus manos pequeñas y suaves agarrando las mías para impedir que al acabar el cuento, y aunque estuvieras dormida, me fuera de tu habitación abandonándote a la suerte de los sueños.

Era un cotidiano rito nocturno. Y como todos los ritos había que ejecutarlo, de cabo a rabo.
Me encantaba besarte y dicho sea de paso, olerte. Olías ... ¿cómo decirlo? A hermana menor, una mezcla de ilusiones por crecer para hacerte grande y colonia de niña pequeña.
Y a esas horas, tal como dictan las buenas costumbres en las mejores, y en las peores familias, tu boca y la mía sabían a Signal.

Tuvimos una infancia feliz. Nos enseñaron a querer, nos motivaron para sonreír. ¿Será que acaso a nuestra familia la patrocinaba esa famosa marca de dentífrico?

Sofi, no puedo recibir al nuevo año, a ése que ya nos mira de reojo en los almanaques y las nuevas agendas, sin escribirte antes estas líneas.
¿Será que las chicas somos así? Los varones de la casa prefieren descolgar el teléfono. Nosotras, en cambio, aprendimos a dejar nuestro cariño por escrito.
Como decía papá, “los ritos se han hecho para ser cumplidos”. Inevitablemente cada año.
No se te vaya a olvidar ... el christmas, digo.

Te quiero.
Te echo mucho de menos.
Espero con ansias tus buenos deseos.

Un besote, Caro
¿Confirma que desea enviar?


Carta 2, que no respuesta
Málaga, 29 de diciembre de 2006

Mi añorada hermana


Es precioso. Es mágico. Estaba a punto de sentarme al ordenador para enviarte mi Christmas, y he visto en mi casilla de entrada que ya ha llegado el tuyo. ¡Qué ilusión!

Dejo a un lado recoger la cena, vaciar la bañera o recoger los juguetes, y me decido a escribirte el Christmas. Sin leer el tuyo, aunque me pica la curiosidad.

Se me ha hecho tarde este año. Tal vez te haya extrañado un poco. ¡Esta vez me has ganado! Como siempre ha sido, las responsabilidades de hermana mayor se han demostrado una vez más. Entre ellas, la de los ritos. Gracias por recordarme que tú tampoco los olvidas.

No intento justificarme, sólo quiero contarte que me he entretenido estos días de vacaciones con los niños y no he parado ni un momento. Tampoco me he detenido frente al ordenador. He escrito poco, y he leído aún menos, pero me he divertido.
He intentado dejarme llevar un poco por las sensaciones. Y he recordado sin querer nuestra infancia.
Los cuentos de pequeñas, la magia de nuestros ritos familiares. Y aquí me tienes, deseándote lo mejor que puedas y quieras para un año nuevo que estamos a punto de empezar; como un cuaderno con 365 páginas en blanco para estrenar.

Por cierto, antes te decía que estos días he recordado nuestra infancia. Antes de venir al cuarto del ordenador hacía zapping y me topé con un programa de televisión donde la gente votaba las mejores películas de Disney.
Aún no ha finalizado la emisión, pero de momento “Caperucita Roja” brilla por su ausencia.
Una de dos: o resulta entre las pelis más votadas o acaso los votantes no tenían una hermana que les contara ese cuento con toda la ternura y la dedicación que lo hacías tú.
En mi próxima carta te lo cuento. Prometido.

Carolina, te tengo que dejar. Tengo algo impostergable por hacer: leer el Christmas de mi hermana mayor.

Te quiero, Sofi.

Cuestión de localización

u "Oído al pasar III"

Como no estoy del todo inspirada, podría ser un poco cínica y decir que la musa está de vacaciones. Aunque querría estarlo yo...

Pero no. Seré honesta y diré que me hizo gracia. Es triste en realidad, pero me hizo gracia, y como tampoco estoy inspirada, haré un Copy-Paste.


El que quiera reír, que ría.
Y el que prefiera llorar, también tiene permiso.

Hasta pronto.

Acá va:


"EN LA CLASE DE JARDIN DE INFANCIA EL MAESTRO PREGUNTA A LOS ALUMNOS EN QUÉ TRABAJA SU PADRE. LUEGO DE VARIAS RESPUESTAS TÍPICAS (LECHERO,JARDINERO,CONTABLE ) LE TOCA A LUISITO, QUIEN DICE:
- '' MI PAPA TRABAJA EN UN CLUB NOCTURNO DE HOMBRES GAY, BAILA Y SE QUITA LA ROPA DELANTE DE LOS OTROS. CUANDO QUEDA CON UN SLIP MUY CHIQUITITO, LOS HOMBRES LE COLOCAN BILLETES DENTRO DE LA PARTE DELANTERA DEL SLIP. EN CASO QUE ALGUNO DE LOS HOMBRES LE GUSTE MUCHO, LO TRAE A CASA Y TIENE SEXO CON EL. ESTO LE DEJA BUEN DINERO''
EL MAESTRO NO SABE DONDE METERSE. MANDA A LOS NIÑOS A JUGAR AL PATIO Y LE PREGUNTA: - '' ES VERDAD LO QUE DIJISTE LUISITO?''
- NO, EN VERDAD MI PAPA TRABAJA EN EL AYUNTAMIENTO DE MARBELLA, PERO ME DA VERGÜENZA DECIRLO DELANTE DE MIS COMPAÑEROS."
!!!

Monday, February 05, 2007

Lunes negro

Suena el despertador. Lo apago. - Digo "5 minutos más" que se convierten en hora y pico más tarde. .. y entonces, otra vez me fallo. Y me recrimino por no ser capaz de cumplir lo que pienso, prometo y casi juro la noche anterior.

No sólo salgo de casa sabiendo que otra vez he de mirarme al espejo con el peso de que la promesa de llegar tempranísimo para organizar y adelantar el trabajo es ficticia, sino que encima tomo una decisión absolutamente desacertada: autovía en vez de paseo marítimo.

Tengo que pasar por el banco para una gestión impostergable. Porque sino cobrar la nómina o no cobrarla daría lo mismo. Y es como que no, no da lo mismo.
Luego tengo casi dos horas de autovía, porque lluvia y estupidez al volante dan como resultado atasco. Es inevitable.

Dio igual que para el tramo final me metiera por la autopista de peaje porque a la salida me esperaban, de a ocho que no de a dos como tradición manda, los de la Guardia Civil. ¡Menuda sorpresa!, y yo sin papeles del coche. En fin, mi registro de conducir sirvió para exhibir mi fea foto en él - pero fea con ganas - y quedar "fichada".
Lo bueno? Que ignoraron que había superado con ganas el límite de velocidad. O eso parece ... de momento.

Llego a la máquina vending del pasillo de empleados. Menos mal que cuesta menos que las del pasillo del público porque se me atascan los 2 productos que selecciono. Y el dinero, claro.
Agarro el capuccino, con 2 de azúcar, y tiro para mi despacho mientras pienso, pero sin querer creérmelo del todo. - "Querida, la suerte está echada; hoy será un lunes negro".

En fin ... solamente rescato una sensación en el coche. Atascada, calentita con la calefacción a casi 27º C en el "loro" del coche a bastante volumen: " Rastro, huella ... de los pasos errantes, del buscador de señales... Nunca el tiempo es perdido es sólo un recodo más en nuestra ilusión, ávida de olvido. Nunca el tiempo es perdido ... " de Manolo García.

Parece que poco a poco voy recuperando sensaciones exclusivas de esos viajes de más de 50 km diarios. En mi coche, con mis rollos mentales, con mi radio, y ahora con mi grabadora digital nueva ... para congelar sensaciones, ideas o quién sabe qué.

El otro día dijeron que escribir es un viaje. Y como yo viajo en coche a diario se me ocurrió que la grabadora me podría ayudar a hacer del viaje, un doble viaje. Veremos qué resultado da.