Thursday, October 23, 2008

Solo o con leche?

... esta mañana desperté tarde, me quedé dormida, supongo que del tirón desde anoche y sin haber soñado nada...; hoy no reconocí debajo de mi almohada el sonido de mi nuevo despertador y tuve que hacer todo del tirón, sin pensarlo, para llegar.
Y a pesar de todo, misteriosamente llegué a tiempo. A tiempo a ducharme, a lavarme los dientes, al aula matinal a dejarla, a mi gasolinera, a mi abstemia de cafeína porque, una vez más, no tenía monedas encima al pasar por el recinto de desayunos de su cole; a tiempo a mi gasolinera recomendable por el precio, a mi radio que se auto-sintonizaba caprichosa por la lluvia

Esta mañana ... no pensar ni en lunares ni tacones ni un adiós al canario. No recuerdo siquiera si cerré del todo bien con llaves e incluso olvidé el paraguas ...

A pesar de las prisas recuerdo que esta mañana desperté y una pena no recordar qué he soñado porque mis manos olían a café, a café recién molido, a café del bueno, del mejor, del compartido incluso alguna vez hasta con besos y abrazos. Olían de verdad y al volante sorteaba a ratos las maniobras intentando encontrar el motivo de ese olor tan pegadizo.
Pero esta mañana no hubo tiempo siquiera para entrar a la cocina, así que de café nada de nada. Ni hecho siquiera por un fantasma y depositado como regalo en la cafetera que siquiera se dónde está guardada.

Olor a café? Sí, señor. Una sensación muy agradable que ahora es sustituida por mi olor a perfume. Misteriosamente me sucece que avanza el día y mi perfume sólo se queda en mis manos ... y sobre el olor a café simplemente diré que ojalá hoy muchos hayan tenido café con risas, besos y abrazos ... Como dice una amiga mía... ¡qué envidia!

1 comment:

El Tigre de Mompracem said...

Hola!
Comparto contigo el gusto por el olor a café!. Por todo del café!
Un placer encontrar tu blog. Me ha encantado!